El melocotón es una planta realmente asombrosa, cuya belleza de flores rivaliza con el asombroso sabor de la fruta. Quizás por eso los melocotoneros están cubiertos de numerosas leyendas y son muy venerados en los países de Oriente.
Melocotón en el simbolismo y la mitología
El origen del melocotón es China. Desde la antigüedad, el melocotón ha sido considerado un símbolo de inmortalidad allí. En la mitología, figuraba como una de las Tres Frutas Benditas (las otras dos eran cítricos y granada). Las leyendas dicen que los melocotoneros crecen a la entrada de las cuevas que conducen al inframundo. Se creía que su madera ahuyentaba a los demonios. Las hermosas flores de durazno se asociaron con la imagen de una niña. Además, simbolizaban la confusión de sentimientos inherentes a la juventud. En muchos países, el melocotón es un símbolo de longevidad y cálidas relaciones familiares. Según la filosofía oriental, las flores de durazno dan un nuevo amor a una mujer abandonada o viuda joven. En Vietnam, un melocotonero en flor simboliza la primavera, y en Japón incluso hay un festival de flor de durazno.
Flor de melocotón
El melocotón pertenece a la familia de las rosáceas. Los criadores han criado muchas variedades decorativas hermosas con flores simples, dobles o semidobles. Hay colores muy diferentes de flores de durazno: blanco, rosa, rojo y, a veces, de dos colores. Flores delicadas y elegantes cubren densamente las ramas de los árboles, difundiendo un aroma ligero y agradable, que se ha utilizado con éxito para crear exquisitas fragancias. La flor de durazno dura de 6 a 12 días, sin embargo, en condiciones de calor extremo se desvanece en 3 días.
Propiedades útiles del melocotón
Los frutos de durazno se distinguen por una pulpa dulce y jugosa y una piel aterciopelada y rojiza. La pulpa en diferentes variedades puede ser blanca, amarilla o rojiza. Los duraznos frescos son la fuente más rica de vitamina C. Las personas que les encanta darse un festín con ellos rara vez sufren de enfermedades cardiovasculares y trastornos cerebrales, debido a su alto contenido de potasio y fósforo. Los melocotones son imprescindibles para quienes padecen anemia o trastornos metabólicos, ya que contienen mucho hierro. Los melocotones tienen un efecto beneficioso en mujeres embarazadas, niños y adolescentes, así como en quienes padecen de baja acidez. A partir de la pulpa de los melocotones, se elaboran mascarillas para la piel del rostro, gracias a las cuales adquiere un aspecto saludable, volviéndose fresca, elástica y tierna. Los huesos de melocotón son la base para la producción de aceites cosméticos con olor a almendra amarga. Por lo tanto, la belleza, la salud y el buen gusto son igualmente inherentes al melocotón.