Para garantizar la combustión del combustible en las calderas, es necesario alimentar constantemente los hornos de la caldera con aire, así como garantizar la emisión sin obstáculos de productos de combustión a la atmósfera. En los casos en que la resistencia de las calderas y las líneas de gas es grande y no permite que los gases se muevan con la ayuda de tiro natural, se crea un tiro artificial (forzado).
Instrucciones
Paso 1
Tiro forzado: eliminación de los residuos de combustible quemados utilizando extractores de humo (se llama "tiro artificial de acción directa") o suministrando aire a presión a los equipos que queman combustible. También se utiliza tiro forzado para la ventilación por extracción en edificios.
Paso 2
Los dispositivos de extracción de humos y suministro de aire constan de extractores, conductos de aire, conductos de gas, ventiladores que sirven para la inyección de aire forzado y una chimenea. Con la ayuda de este equipo, se lleva a cabo el suministro continuo del volumen de aire requerido a la cámara de combustión, el movimiento de los gases de combustión a través de los conductos de gas del dispositivo de caldera y su liberación al medio ambiente.
Paso 3
Durante el funcionamiento se constató que era necesario soplar más aire del indicado en la documentación técnica. El combustible y el aire no se mezclan completamente en el horno y parte del oxígeno no se quema, sino que sale de la caldera junto con los productos de combustión. De esto se deduce que la potencia de los ventiladores que suministran aire debe calcularse para el factor de eficiencia máxima incorporado en el diseño del equipo de la caldera. La misma regla se aplica a los extractores de humo. A menudo, tratando de ahorrar energía, instalan bombas de escape del mismo tipo, pero con una potencia relativamente pequeña y un número menor de revoluciones del motor eléctrico, lo que reduce significativamente el tiro en la caldera.
Paso 4
El tiro insuficiente en la caldera conduce a un funcionamiento inestable del equipo de la caldera, el combustible no se quema por completo y se libera a la atmósfera, y esto está plagado de la posterior obstrucción de la chimenea con partículas de hollín y cenizas, lo que a su vez a menudo obliga a la caldera para ser detenido y limpiado. Además, la combustión incompleta del combustible conduce a la quema de los materiales aislantes y su reemplazo frecuente aumenta el costo de funcionamiento de la caldera. La disminución del tiro también contribuye al hecho de que la habitación donde se encuentra la caldera está llena de humo y esto requiere inversiones adicionales para el dispositivo de una campana artificial en el edificio.
Paso 5
El proceso de suministro de aire forzado y tiro forzado, organizado de acuerdo con las reglas, reduce significativamente las pérdidas en la quema de combustible, aumenta la potencia de los equipos de la caldera y aumenta su vida útil sin mantenimiento.