El 18 de julio de 1994 se produjo un atentado terrorista en un centro cultural judío de Buenos Aires. Un automóvil lleno de explosivos fue volado frente al edificio de la AMIA (Asociación de Ayuda Mutua de Judíos Argentinos). Como resultado de esta tragedia, 85 personas murieron y otras 300 resultaron heridas. Exactamente dieciocho años después, ocurrió una tragedia similar en una de las ciudades de Bulgaria.
El 18 de julio de 2012, un autobús explotó en el aeropuerto de Sarafovo, que se encuentra en la ciudad búlgara de Burgas. Había un grupo de turistas israelíes en él. Había tres autobuses en total que se suponía que iban a llevar a los pasajeros desde la terminal del aeropuerto hasta el hotel. La explosión tronó tan pronto como los autobuses comenzaron a moverse. Los otros dos autobuses se incendiaron con la explosión.
El ataque terrorista mató a siete personas. Cinco israelíes, un guía búlgaro y un terrorista suicida. Faltan nueve personas. Más de 30 personas recibieron lesiones de diversa gravedad, tres de ellas se encuentran en estado crítico. Todas las víctimas fueron trasladadas al hospital de la ciudad, que está fuertemente custodiado por escuadrones policiales.
Después del ataque terrorista, las autoridades búlgaras cerraron el aeropuerto de Sarafovo. Todos los vuelos fueron redirigidos al aeropuerto de Varna. Algunos vuelos se retrasaron o cancelaron. Los propios pasajeros israelíes, que no sufrieron el ataque terrorista, se encontraban en el edificio del aeropuerto. En total, son más de cien personas. Esto se hizo para que pudieran testificar y también por su seguridad.
El grupo islámico previamente desconocido "Kedat al-Jihad", que en traducción significa "Fundamentos de la Guerra Santa", se atribuyó la responsabilidad del ataque. Hicieron una declaración oficial y advirtieron que se llevarían a cabo más ataques terroristas. Sin embargo, las autoridades búlgaras niegan la participación de este grupo en el ataque. La versión más probable parece la participación de la organización chiíta libanesa militarizada y el partido político Hezbollah en el ataque terrorista.
Se supone que el ataque fue una venganza por la eliminación del jefe del departamento de operaciones del "Partido de Alá", Imad Murnia. Al mismo tiempo, la propia organización Hezbollah niega cualquier participación en este ataque terrorista. Cabe señalar que el acto terrorista se cometió en el aniversario de la tragedia en Buenos Aires. La responsabilidad de la tragedia del 18 de julio de 1994 recae precisamente en esta organización.
Después de todos los eventos en Burgas, las autoridades israelíes hicieron un comunicado oficial de que en los Juegos Olímpicos de Londres se incrementará el personal de seguridad de los atletas del equipo olímpico nacional. El gobierno del país teme que se repitan los hechos ocurridos en los Juegos Olímpicos de Verano de Múnich en 1972, cuando la organización palestina Septiembre Negro mató a once israelíes.
