Si presencia una descarga eléctrica en una persona, es importante poder ayudarla correctamente. Esto salvará la vida de la víctima. Según las estadísticas, solo en el 1,5% de los casos, una descarga eléctrica es fatal para una persona si se libera del efecto dañino a tiempo.
Instrucciones
Paso 1
Si nota que una persona está bajo la influencia de una corriente eléctrica, apague inmediatamente la fuente de alimentación: apague el interruptor o, si tiene un hacha a mano, corte los cables. Debe cortar los cables estrictamente uno a la vez, todo el trabajo se realiza solo con las manos secas y las herramientas secas.
Paso 2
Si corres hacia el interruptor y la cuenta continúa en segundos, libera a la víctima de la acción de la corriente con la ayuda de un objeto dieléctrico: un palo de madera, una herramienta de plástico u otro material improvisado. Al mismo tiempo, es mejor envolverse las manos con un paño seco y pararse sobre una tabla, madera contrachapada o paño seco. Esto te salvará de una derrota accidental.
Paso 3
Si no hay nada adecuado a mano, tire de la víctima por el dobladillo de la ropa. Al hacer esto, sus manos deben estar secas y protegidas: use guantes o envuelva sus manos en cualquier paño no húmedo.
Paso 4
Habiendo liberado a la víctima del efecto dañino, establezca el grado de daño al cuerpo y comience a brindar primeros auxilios. Si una persona está consciente, debe tranquilizarla, calentarla, darle una bebida caliente y luego llamar inmediatamente a una ambulancia. La corriente eléctrica también es peligrosa porque la derrota puede manifestarse solo después de unas pocas horas en forma de parálisis repentina. Si hay lesiones: hematomas por caída, esguinces, fracturas, preste primeros auxilios y espere la llegada de los médicos.
Paso 5
Si la víctima ha perdido el conocimiento, pero su respiración es bastante normal, acueste a la persona sobre una superficie suave, libérela de la ropa vergonzosa, proporcione un flujo de aire, lleve un hisopo de algodón con amoníaco a la nariz.
Paso 6
Si se produce la muerte clínica por exposición a la corriente (no hay pulso ni respiración, las pupilas están dilatadas), acueste inmediatamente a la víctima boca arriba y proceda a las medidas de reanimación: ventilación artificial y compresiones torácicas.