Las malas hierbas son plantas que no son útiles en el cultivo, cuyo crecimiento afecta negativamente la germinación de semillas de cultivos útiles. Las malezas se combaten tanto a nivel de un área suburbana separada como a nivel de toda la agricultura en su conjunto. Los herbicidas continuos son de gran ayuda en esta lucha.
Que son los herbicidas
Los herbicidas continuos son compuestos químicos que tienen un efecto destructivo en todo tipo de plantas: tanto cultivos útiles como malezas.
El principio de estos productos químicos es simple: entran en la planta a través de las hojas y la matan desde el interior. Sobre la base de los signos de acción externos en la planta y los métodos de aplicación, todos los herbicidas se dividen en tres subgrupos.
El primer grupo está formado por sustancias que infectan las partes terrestres de las plantas cuando entran en contacto directo con la droga. Estos herbicidas actúan rápidamente y no son arrastrados por la lluvia. Interrumpen los procesos de vida de la planta, lo que conduce a su muerte. Pero cuando se usa este tipo de herbicida, los nuevos brotes verdes a menudo vuelven a crecer.
El segundo grupo incluye herbicidas sistémicos. Sus productos químicos se mueven a través de la planta desde el punto de contacto hasta los puntos de crecimiento de las plantas y hacen que mueran. Estos productos químicos se aplican generalmente a plantas perennes con fuertes sistemas de raíces.
El tercer grupo está formado por herbicidas, que se introducen en el suelo para destruir las semillas en germinación y las raíces de las malas hierbas.
¿Cómo se utilizan los herbicidas continuos?
Este tipo de producto químico se utiliza en los casos en que no hay cultivos en la zona seleccionada. Por ejemplo, antes de sembrar, después de cosechar o en parejas. Y también en áreas donde se prevé la eliminación completa de vegetación, por ejemplo, en sitios donde se planea la construcción, en el derecho de vía cerca de vías férreas y carreteras, en aeródromos y áreas industriales. En particular, se utilizaron herbicidas continuos en los Estados Unidos para rociar partes del Parque Nacional Washington entre Virginia Occidental y Kentucky. Este procedimiento se llevó a cabo con el objetivo de cultivar nuevos árboles a partir de semillas y plántulas preparadas.
Dependiendo del cultivo, se utilizan diferentes métodos de aplicación de herbicidas continuos. En cultivos anuales, por regla general, se llevan a cabo tratamientos previos a la siembra, post-siembra temprana, precosecha y poscosecha. En cultivos perennes, como huertos y viñedos, el procesamiento se realiza entre árboles.
Los desarrollos modernos hacen posible el uso de herbicidas tanto continuos como selectivos. La ingeniería genética permite cultivar cultivos modificados que tienen un gen de resistencia a ciertos herbicidas. En primer lugar, se trata de soja, remolacha azucarera, patatas. Estos cultivos no reaccionan de ninguna manera a los efectos nocivos de los productos químicos.