Existe la opinión de que si te pones la concha en la oreja, puedes escuchar el sonido del mar de donde fue traída. Sin embargo, los expertos dicen que la razón de estos sonidos se encuentra en otra parte.
Quizás solo los niños realmente crean que los sonidos que se pueden escuchar al poner una concha en el oído son el sonido del mar. Sin embargo, los adultos a menudo malinterpretan las causas de estos sonidos.
Versiones refutadas
Durante mucho tiempo, una de las principales explicaciones del "ruido del mar" en el caparazón fue la suposición de que la persona que lo aplicó en el oído realmente escucha los sonidos amplificados que produce su propia sangre al fluir por los vasos. Sin embargo, luego se llevó a cabo un simple experimento, que sirvió como una refutación convincente de esta explicación. Entonces, se sabe que el flujo sanguíneo en el cuerpo aumenta significativamente después de un esfuerzo físico intenso: todos pueden experimentar la validez de este postulado, por ejemplo, simplemente saltando enérgicamente sobre el terreno durante unos minutos. Al mismo tiempo, si después de tales ejercicios te pones la concha en la oreja, el “ruido del mar” no será más fuerte ni más fuerte.
Otra explicación, que también tuvo sus adeptos, fue la afirmación de que los sonidos emitidos son consecuencia del movimiento de masas de aire a través de los espacios interiores del caparazón. Sin embargo, incluso esta suposición es bastante fácil de refutar entrando en una habitación con buen aislamiento acústico: a pesar de que las masas de aire en dicha habitación también se mueven, la carcasa permanecerá en silencio.
Explicación moderna
Obviamente, la ocurrencia de tal fenómeno está asociada con la acción de algunos otros factores. Según los expertos en el campo de la física, la verdadera razón por la que el caparazón llevado al oído "emite" sonidos similares al sonido del mar es que los sonidos que rodean al oyente en ese momento, reflejados en las paredes del caparazón, son distorsionados y crean un zumbido característico. Esto se debe al hecho de que la cavidad del caparazón en este caso actúa como un resonador, que cambia y amplifica el sonido del ruido extraño.
En general, cualquier cavidad adherida a la oreja, por ejemplo, un vaso u otro recipiente, puede actuar como tal "concha". Y la forma diferente que tienen las diferentes conchas, determina el hecho de que su sonido será diferente. Sin embargo, cada uno de nosotros, al colocar al oído un caparazón traído de un viaje lejano, probablemente no piensa en las causas de este fenómeno físico, sino que recuerda largas caminatas a lo largo de la costa del mar. En este sentido, tal caparazón es realmente para su propietario la fuente de los sonidos de las olas del mar …