Con el tiempo, el aire en los locales industriales y residenciales se contamina y adquiere un olor desagradable bajo la influencia de la actividad humana. Un dispositivo como un ozonizador ayuda a purificar el aire y saturarlo con ozono.
Concepto de ozonizador
Un ozonizador es un dispositivo que satura el aire con ozono. Este elemento químico es extremadamente inestable y puede degradarse en solo unos minutos después de su formación. Además, durante una existencia tan corta, el ozono se descompone casi por completo y modifica toda la composición del aire atmosférico. Por tanto, el efecto del ozono es comparable al de una especie de aspiradora química. Es para estos fines que se utiliza un aparato eléctrico doméstico como un ozonizador.
El ozonizador, que se utiliza para refrescar el aire en varias habitaciones, tiene un principio de funcionamiento simple. Se aplica voltaje eléctrico a dos placas paralelas, lo que crea una descarga. Al actuar sobre las moléculas de oxígeno, una carga eléctrica conduce a su descomposición en oxígeno atómico que, cuando se combina con oxígeno molecular, forma ozono. Apenas unos minutos después de encender el aparato, la composición del aire en la habitación cambia y adquiere un agradable olor fresco. Es comparable al aroma específico en el aire después de una tormenta. Los ozonizadores eliminan eficazmente el olor a humo, pintan los materiales después de la renovación y simplemente ayudan a ventilar las habitaciones sin tener que dejar las ventanas abiertas todo el día.
Características distintivas del ozonizador
Los ozonizadores a veces se confunden con los ionizadores, pero, de hecho, son dispositivos completamente diferentes. El ionizador enriquece las moléculas de aire con una carga eléctrica negativa adicional, pero incluso los modelos más avanzados no pueden generar ozono. Este componente es un agente oxidante muy fuerte y es extremadamente tóxico incluso en bajas concentraciones. Se utiliza en síntesis industrial (por ejemplo, para obtener ácido succínico en la industria del caucho), en terapia (ozonoterapia). También se utiliza para la desinfección y depuración de agua potable (en embarcaciones fluviales) y efluentes industriales que contienen materia orgánica fácilmente oxidable, y el uso de oxidantes tradicionales es indeseable por una razón u otra.
Las propiedades curativas del ozono han sido probadas repetidamente por investigaciones médicas. Es un agente profiláctico eficaz frente a diversas enfermedades, mejorando notablemente la calidad de vida e incluso capaz de frenar el envejecimiento. El ozono tiene un potente efecto desinfectante, desinfectante, oxidante y desintoxicante, varias veces superior a otros agentes conocidos con un espectro de acción similar.