A menudo hay situaciones en la vida en las que es necesario memorizar un texto. Estos pueden ser poemas del plan de estudios de la escuela, textos para un examen de inglés, presentaciones en el trabajo y mucho más. Existe un sistema que te permitirá memorizar rápidamente incluso los textos más complejos y largos.
Instrucciones
Paso 1
Cada persona tiene sus propias características, también se relacionan con la forma de memorizar la información. Es más fácil para alguien aprender el texto por repetición mecánica, alguien necesita escuchar el texto varias veces, otros necesitan mirarlo durante mucho tiempo o reescribirlo varias veces a mano. Esto se debe al hecho de que diferentes personas han desarrollado mejor diferentes tipos de memoria. Para aprender bien el texto y durante mucho tiempo, es necesario utilizar todo tipo de memoria, prestando más atención a su tipo dominante.
Paso 2
Primero, lea el texto con atención, asegúrese de entenderlo, de que conoce y comprende cada palabra. Si hay palabras incomprensibles en el texto, busque sus significados en el diccionario. Si el texto está en un idioma extranjero, asegúrese de pronunciar cada palabra correctamente para que todo el texto suene competente y hermoso.
Paso 3
Luego lea el texto en voz alta, escuchando sus palabras. Trate de leer de manera expresiva, en voz alta, para que la información se recuerde mejor. Si lo mejor es llamar por teléfono y escuchar unas cuantas veces.
Paso 4
Luego memorice el texto pieza por pieza. La ayuda de los seres queridos será muy valiosa. Te leerán el texto según la frase o la parte semántica, y lo repetirás. Si no tiene a nadie a quien pedir ayuda, hágalo todo usted mismo: primero lea y luego repita lo que leyó sin depender del texto.
Paso 5
Después de trabajar en partes pequeñas, pase a fragmentos más largos: cuartetos o párrafos. Trate de mirar el texto lo menos posible. Luego intente contar todo el texto.
Paso 6
Conectar emociones es muy útil. La información coloreada emocionalmente se memoriza mucho más fácilmente y permanece en la memoria por más tiempo. Intenta contar el texto, dándole uno u otro color emocional. Dígalo como si estuviera feliz o, por el contrario, muy triste. A los niños les gusta mucho contar textos y poemas, imitando los sonidos de animales u objetos del mundo que les rodea. Imagínese cómo este texto diría un cordero, cómo croaría una rana o chilló un mosquito.
Paso 7
Después de asegurarte de haber aprendido el texto lo suficientemente bien, dale un descanso a tu cerebro. Realice otra actividad que no obligue a su memoria a trabajar activamente. Una hora después, repite el texto de nuevo, con la expresión con la que finalmente lo contarás.
Paso 8
Es mejor aprender los textos al menos un día antes de la hora en que los va a recitar. Por la mañana, antes de hablar, debe repetir el texto nuevamente. Por cierto, es por la mañana cuando la memoria está más activa, mientras que por la tarde descansa. En la primera mitad del día, los textos se aprenden mucho más fácil y rápido. Es mejor finalmente repetir el texto frente a un espejo para poder mirarse de lado, para suprimir movimientos, gestos y posturas no deseados que puedan surgir de la excitación y la tensión.