Todo aquel que ha utilizado los servicios de transporte ferroviario al menos una vez en su vida notó que al mover las ruedas del vagón emiten un sonido peculiar, que recuerda a un golpe. Incluso se han escrito canciones sobre esto.
Entonces, ¿por qué golpean las ruedas del ferrocarril? Probablemente todos se hicieron esta pregunta. ¿Cómo pueden las ruedas redondas y uniformes golpear en una pista absolutamente plana? La respuesta está en la estructura misma de las vías del tren; la plataforma del ferrocarril nunca ha sido perfectamente plana. La tecnología moderna aún no puede hacer y colocar correctamente un carril de varios kilómetros, e incluso tener en cuenta todos los giros y puntos de transferencia de las flechas. Un ferrocarril es un conjunto de segmentos de riel individuales colocados de extremo a extremo. Y la razón aquí no es solo la dificultad de fabricar y entregar un riel de una pieza de la longitud requerida. Como saben, los cuerpos se expanden cuando se calientan. Esto también ocurre con los rieles de ferrocarril, independientemente de si pasa un pasajero o un tren de mercancías, un tranvía, un tren eléctrico o un metro. El golpe permite que el metal se expanda libremente en longitud. Es en estas articulaciones, debido a la irregularidad artificial creada, donde se forma el golpe. Lógicamente, podemos suponer que las ruedas golpean menos en verano. Sin embargo, incluso el más mínimo espacio entre los rieles es suficiente para que se escuche el sonido La segunda razón por la que las ruedas pueden golpear es la apariencia de un deslizador debido al patinaje en el juego de ruedas. Es decir, la rueda simplemente se bloqueó por alguna razón. Sin embargo, en el transporte ferroviario moderno, se instala un sistema de control electrónico especial que elimina por completo este fenómeno Vale la pena señalar que ahora se utiliza cada vez más un sistema especial de colocación de rieles sin juntas. Esta tecnología reduce significativamente las pérdidas de energía y el desgaste en los juegos de ruedas y rieles del tren. Además, se reduce el número de defectos que aparecen en el material del carril en las juntas cuando la rueda golpea. La mayoría de las veces, esta innovación se utiliza en las líneas de tranvía y en el metro.