La cinta de doble cara es un material prácticamente insustituible en trabajos de construcción, instalación y techado. Además, ha encontrado una amplia aplicación en las industrias del embalaje, la automoción y la confección. Debido a sus altas cualidades, la cinta adhesiva le permite pegar de manera confiable los materiales y objetos necesarios en casi cualquier superficie. El único inconveniente es que es extremadamente difícil despegar la cinta de doble cara sin dañar la superficie a la que está pegada.
Instrucciones
Paso 1
Trate de quitar la cinta suavemente con un cuchillo o una navaja. A veces, esto es suficiente para eliminar los restos de la cinta vieja. Si esto no ayuda, use uno de los siguientes métodos:
Paso 2
Compre un disco especial para quitar la cinta de doble cara en una tienda. Eso sí, no es barato, pero justifica su precio, ya que quita la cinta sin problemas, sin dejar rastros. Además, uno de esos discos será suficiente durante mucho tiempo.
Paso 3
Sature la tela con queroseno o aguarrás. Coloque un paño encima de la cinta y frótelo ligeramente. Una vez que la cinta esté suave, recójala y quítela de la superficie. Elimine todos los restos con el mismo alcohol o queroseno. A veces, para que la cinta adhesiva se ablande, es necesario frotarla durante mucho tiempo con un paño húmedo. Sin embargo, tenga en cuenta que el aguarrás puede oscurecer la pintura.
Paso 4
Calienta la cinta con un secador de pelo o frotando regularmente. Una vez que se caliente, sáquelo con cuidado y retírelo lentamente de la superficie. Todos los rastros dejados por la cinta, limpie con una servilleta humedecida con alcohol.
Paso 5
Consigue un borrador especial en una tienda o en un pintor de casas. Insértelo en el destornillador y utilícelo para limpiar toda la cinta. Limpie los restos restantes con queroseno o alcohol.