La velocidad de movimiento de los barcos suele expresarse en nudos. Un nudo es la velocidad que permite a un barco viajar una milla náutica en una hora. En términos de las unidades de medida familiares para la mayoría de la gente, un nudo equivale a 1.852 kilómetros por hora.
Instrucciones
Paso 1
En la práctica náutica, se acostumbra medir la velocidad de un barco en nudos. Un nudo es una velocidad tal que puedes cubrir una milla náutica en una hora. En términos de nuestros kilómetros habituales, un nudo son 1.852 kilómetros por hora. En consecuencia, para convertir nudos en kilómetros por hora, basta con multiplicar la velocidad en nudos por 1.852.
Paso 2
Si tienes Internet al alcance de la mano, para convertir los nodos en kilómetros, solo necesitas ir al buscador de Google e ingresar una frase como "5 nodos por kilómetro". Google es un motor de búsqueda inteligente y tiene una calculadora de conversión de unidades incorporada, por lo que le mostrará la información que está buscando en la página de resultados. Por ejemplo, para la frase de búsqueda utilizada como ejemplo, mostrará la inscripción "5 nudos = 9,26 kilómetros". Kilómetros aquí significan la velocidad en kilómetros por hora.
Paso 3
La existencia de nudos en la práctica náutica está estrechamente relacionada con el concepto de "milla náutica". Inicialmente, se tomó como la longitud de la superficie de la Tierra en el tamaño de un minuto de arco. Si el barco se movía a lo largo del meridiano durante un minuto de latitud, se decía que había recorrido una milla náutica. Más tarde, la milla se equiparó a 1852 metros.
Paso 4
El mismo nombre "nudo" proviene del método de medir la velocidad de los barcos utilizando un registro. El retraso era una tabla triangular con una cuerda y una carga atada a ella. Lo arrojaron a popa y contaron el número de nudos atados a la cuerda, que se fue al agua en un minuto.
Paso 5
Los barcos modernos navegan mucho más rápido que los que se usaban en la época en que se usaban troncos de cuerda. Entonces, los yates deportivos fabricados por Columbus están equipados con potentes motores diesel capaces de acelerar el barco a una velocidad de 22 nudos, aproximadamente 40 kilómetros por hora. Y en uno de los yates deportivos de la clase "40", el atleta inglés Nick Bubb pudo alcanzar una velocidad de 34 nudos, unos 60 kilómetros por hora.