Para que cualquier producto tenga demanda, debe tener propiedades y cualidades que le sean útiles a la sociedad. Pero además, su popularidad puede incrementarse a través de varios mecanismos de mercado, uno de los cuales es la publicidad.
La publicidad más simple existía incluso en el mundo antiguo. En Egipto, se podían encontrar papiros, que informaban de la venta de cualquier propiedad, la mayoría de las veces esclavos. La publicidad consistía entonces en inscripciones garabateadas o pintadas en las paredes de los edificios. En Grecia y Roma, se colocaron en tablas y grabados que se colgaron y se leyeron en la plaza.
Publicidad en Occidente
Los primeros anuncios en el sentido habitual aparecieron en el siglo XV. Luego, Johannes Gutenberg inventó la imprenta, que marcó la era de la educación y los libros masivos. El primer anuncio impreso data de 1472. Informaba sobre la venta de libros de oraciones en la iglesia a cuyas puertas se adjuntaba.
En 1630 Theophrastus abrió celosamente una oficina de referencia, que se dedicaba a la publicación de anuncios impresos en la Gaceta Francesa. Pero eran, por regla general, de carácter no comercial y fueron presentados por ciudadanos individuales.
Más tarde, los comerciantes se dieron cuenta de los beneficios de la publicidad y comenzaron a anunciar sus productos. La mayoría de las veces era comida. Al principio estaban limpios y secos. Pero pronto el tono y el carácter de los mensajes cambiaron, y el uso de técnicas de trama y diseño se convirtió en una práctica común.
Después de la invención de la fotografía en 1839, el texto publicitario comenzó a complementarse no solo con ilustraciones dibujadas. Esto, a su vez, aumentó la confianza de los clientes potenciales, ya que anteriormente no se podía cambiar la foto sin el riesgo de detectar una falsificación.
Luego, las agencias especiales comenzaron a ocuparse de la publicidad. Brindaron servicios para la recopilación del texto, la selección de fotografías, ubicación. Entonces, la primera empresa que, entre otras cosas, se dedicó y realizó campañas publicitarias se considera la agencia Ayer and Son. Fue fundada en 1890.
Publicidad rusa
Los comerciantes rusos en el siglo X. utiliza la publicidad como una forma de promocionar sus productos. Así que pagaron una cierta cantidad a los ladrones. Este último se paró junto a la tienda del comerciante y notificó en voz alta a los transeúntes sobre la disponibilidad de tal o cual producto, sus méritos.
Las imágenes populares, las impresiones populares, hicieron una cierta contribución al desarrollo del negocio publicitario. Transmitieron información e ideas en forma de imágenes. Un lugar significativo en ellos lo ocuparon mensajes de carácter comercial. Y con el desarrollo de la economía, se han convertido en una excelente forma de publicidad.
En el siglo XIX, la publicidad asumió todo tipo de formas: se colocó en pedestales redondos en las calles, los niños y adolescentes la distribuyeron en forma de calendarios y listas de precios. Además, aparecieron los primeros periódicos publicitarios, como Nizhegorodskaya Yarmarka y Trade.
Después del establecimiento del poder soviético, la publicidad, como todas las demás ramas de la actividad pública, quedó bajo el control del partido. Fue solo un medio de popularizar y promover la monopolización. Solo los miembros del gobierno podían publicarlo. Tras la Guerra Civil y la NEP, la publicidad comercial volvió a resurgir.