Por eso el destino ha decretado que algunos nazcan o se conviertan en personas con discapacidad. Les resulta bastante difícil adaptarse a las condiciones de vida, a la sociedad que les rodea, a su inferioridad. Pero la mayoría de ellos tienen un carácter mucho más fuerte que la gente común. Y esto ayuda a que un grupo de población así prácticamente no se destaque de la masa general.
Personas discapacitadas. Este es el término médico adoptado para referirse a las personas con discapacidad. Recientemente, el término se ha utilizado únicamente en los cuerpos de expertos médicos y sociales.
Esta categoría incluye a aquellos cuyas enfermedades o lesiones previas conducen a la restricción o pérdida completa de la capacidad de trabajo y el autocuidado. La causa de tales afecciones puede ser diversas enfermedades somáticas, defectos congénitos y adquiridos del sistema musculoesquelético, lesiones y enfermedades que conducen a la pérdida de un órgano o parte anatómica del cuerpo.
Los defectos físicos no son la única causa de discapacidad. Las enfermedades mentales también conducen a la discapacidad, aunque son algo menos comunes.
Las personas con discapacidad necesitan una actitud especial hacia ellas no solo por parte de los demás, sino también del estado. Por eso tienen derecho a diversas prestaciones y condiciones de vida especiales.
A menudo, personas tan especiales tienen talentos en varios campos del arte y la tecnología. Y los logros de los deportistas con discapacidades físicas a veces superan a los de las personas sanas. La historia recuerda muchos ejemplos de la vida de personajes famosos con discapacidad y las alturas que lograron alcanzar.
Todos conocen a los héroes de la Guerra Patriótica: el piloto Maresyev y el luchador Belousov, que no tenían piernas. Pero esto no les impidió realizar hazañas heroicas en la guerra. El presidente estadounidense Franklin Roosevelt desde los 28 años dejó de moverse de forma independiente debido a una grave enfermedad. Pero esto no le impidió asumir el cargo de jefe de Estado a los 39 años.
Las personas con discapacidad pueden ocupar varios puestos, trabajar en muchos campos de actividad e incluso actuar en su propio teatro. Así es como los actores del Teatro de los Inocentes sorprenden a todos con su destreza.
Las personas con discapacidades físicas o mentales tienen la oportunidad de recibir educación, trabajar y sentirse como personas comunes. En esto son ayudados por la rehabilitación individual (familiar) y social. Un trato benévolo y adecuado de estas personas les ayuda a sentirse demandadas por la sociedad. Y esto es muy importante para no sentirse como un error de la naturaleza.