Los tiburones han tenido una mala reputación durante mucho tiempo, pero este no es un monstruo, sino una criatura viviente común, cuyo comportamiento se puede calcular y, por lo tanto, salvar su vida. La regla más importante es no entrar en pánico al encontrarse con un tiburón.
Medidas de precaución
El cine moderno ha dotado a los tiburones durante mucho tiempo de las características de monstruos insidiosos, pero en realidad los tiburones no son asesinos calculadores, sino criaturas vivientes ordinarias que siguen sus instintos. Un tiburón puede ser dominado por el hambre, pero no atacará sin pensar a la primera criatura viviente que se le presente. Ella solo sigue el instinto de autoconservación y, por lo tanto, solo correrá un riesgo justificado si le das una señal de que eres "duro" con ella.
Incluso cuando se va de vacaciones, debe pensar en su seguridad. Para nadar en el mar, un traje de baño brillante de una pieza no es adecuado, ya que un tiburón puede confundirlo con escamas y aletas de pez, y esto le dará más parecido con la vida marina. Incluso acciones tan simples pueden ayudarlo a evitar un trágico encuentro con este animal.
Qué hacer cuando te encuentras con un tiburón
Si las circunstancias se han desarrollado de tal manera que se enfrenta a este peligroso depredador, lo más importante que debe hacer es no entrar en pánico. Por supuesto, es extremadamente difícil hacer esto en una situación así, pero su vida depende de ello. Si comienzas a nadar nerviosamente hacia la orilla, no tendrás ninguna posibilidad de ser más rápido que un tiburón. Por lo tanto, es importante concentrarse, en primer lugar, en las acciones del tiburón y no perderlo de vista ni por un segundo, ya que una de las tácticas del tiburón es una retirada temporal de la víctima, y luego un ataque brusco. Si está lejos de la costa, lo más razonable es tratar de encontrar refugio en las cercanías; puede ser cualquier obstáculo sólido: arrecifes, montones o afloramientos de rocas, esto le permitirá reflejar el ataque solo frente a usted.. Es posible que deba profundizar más para hacer esto, pero la solución es mejor que una subida brusca, y hacerlo puede desencadenar la enfermedad por descompresión. Si no está solo en el agua, sino con alguien más de la gente, entonces es mejor acurrucarse espalda con espalda, esto le dará un mayor ángulo de visión y, en consecuencia, más control sobre la situación.
Batalla
Lo más importante aquí es mostrarle al tiburón que no tiene la intención de rendirse, pero que representa una amenaza fuerte y real para él. Golpes fuertes y cortantes en puntos vulnerables: los ojos y las branquias te ayudarán en esto. Concentra todas tus fuerzas en ellos, ya que otras partes del cuerpo de este depredador son menos susceptibles al dolor. Nunca apuntes a la nariz, esta área está muy cerca de los dientes del animal, y esta táctica puede jugar una broma cruel contigo. Además, no retrates a un animal muerto, en el caso de un tiburón, solo te mostrarás como una presa fácil. Si tiene un arma, úsela, apunte a la cabeza, especialmente, como se describió anteriormente, a los ojos y las branquias. Si no hay arma, usa tu ingenio, cualquier objeto improvisado te puede ayudar: cámara, piedra, etc. Lo último que queda son tus manos, pies, puños. Si tienes una presa, dáselo al tiburón, tal vez él esté contento con ella y no corra riesgos adicionales.
La próxima acción importante para usted será salir del agua, ya que se encontrará verdaderamente seguro solo en tierra. Pero el ascenso desde las profundidades debe ser suave, los movimientos convulsivos atraen la atención de los tiburones, ya que estas son las acciones habituales de un animal herido o lisiado. Esté atento y tranquilo. Cuando esté a salvo, debe consultar a un médico.