Ya sea que patinar sobre hielo sea divertido o un deporte serio para ti, los patines deben estar bien afilados. De ello dependen la suavidad del deslizamiento, la velocidad de esquiar, la velocidad de frenado y la estabilidad sobre hielo. Si nota que comienza a resbalar al acelerar o que se atasca lateralmente al tomar una curva, entonces las palas de sus patines están desafiladas.
Necesario
Máquina de fijación, papel de lija, barra de afilado, lima
Instrucciones
Paso 1
Consulte a un profesional. Un especialista con todas las herramientas necesarias debe estar presente en las pistas. Sus precios son bastante asequibles y su artesanía le permite evitar problemas con el uso posterior de los patines. Además, con hockey serio o patinaje artístico, es mejor no experimentar con el autoafilado.
Paso 2
Si decide hacer todo usted mismo, primero decida si necesita un surco en sus patines. Las cuchillas se afilan de dos maneras: con y sin ranura a lo largo del borde. El segundo método es adecuado solo para aficionados con un buen nivel de entrenamiento. Será difícil para los principiantes en tales patines frenar y girar, y los atletas perderán maniobrabilidad. Tanto los profesionales como los que dan sus primeros pasos sobre el hielo, es mejor que afilen una hoja ranurada, aunque esto requerirá más esfuerzo.
Paso 3
Para obtener un patín bien afilado sin ranura, fíjelo firmemente con la cuchilla hacia arriba en la máquina. Tome una piedra de afilar especial para cuchillos y conduzca esta piedra a lo largo del lado de la hoja perpendicular a su base. Las virutas de hierro se pueden quitar de la cresta con papel de lija. Asegúrese de que ambos patines estén igualmente afilados.
Paso 4
Use una lima redonda después de asegurar la hoja para obtener dos ranuras perfectamente rectas. La forma correcta de la ranura deberá cortarse a mano. El número de archivo depende del grosor de la hoja y la dureza del acero. La profundidad de la ranura no debe exceder de 0,5 a 0,6 mm. Las rebabas resultantes se eliminan con un bloque de grano fino. Cuando haya terminado de afilar, observe de cerca sus ranuras. Deben tener la misma profundidad en toda la nervadura y la misma en ambas hojas.