En lugar de pavimentar la acera con baldosas, como estaba previsto anteriormente, la capital rusa decidió volver a las aceras asfálticas. A través de los medios de comunicación se supo que las autoridades de la ciudad están ahorrando fondos presupuestarios.
El 16 de agosto, el diario Moskovsky Komsomolets publicó un artículo sobre la suspensión del programa de sustitución del pavimento asfáltico de la capital por losas. El gobierno de Moscú ha decidido detener todos los planes en esta área para el año en curso. Se prevé que los fondos asignados para la colocación de las baldosas se utilicen para resolver otros problemas prioritarios de la ciudad.
El diario recuerda que el pasado verano se inició una campaña a gran escala para sustituir el asfalto por baldosas. Fue iniciado por el alcalde de Moscú, Sergei Sobyanin. Los planos de la administración de la ciudad indicaban que aparecería un pavimento de baldosas en 1, 134 millones de metros cuadrados de aceras de la capital. La cantidad asignada para estas necesidades alcanzó casi 4 mil millones de rublos.
Ya a mediados de agosto del año pasado, Sobyanin anunció que las autoridades no estaban cumpliendo con la tarea planificada, habiendo completado solo la mitad de ella. Señaló que el trabajo de colocación de baldosas en la estación fría, que pronto llegará, es muy difícil. En total, en el verano de 2011, la reposición de asfalto afectó 400 mil metros cuadrados de acera. Se gastaron alrededor de mil millones de rublos en esto. En 2012, se suponía que aparecerían losas de pavimento en casi 240 mil metros cuadrados. Más de 100 mil de ellos están ubicados en el centro histórico de la ciudad.
En marzo se anunció una licitación para la ejecución de estas obras, pero la licitación no se llevó a cabo. Al principio, se pospusieron y luego se cancelaron por completo. De fuentes confiables, Moskovsky Komsomolets conoció que los rumores extremadamente desagradables sobre la imagen del alcalde se convirtieron en la razón del rechazo del programa para la colocación generalizada de azulejos. Según algunos informes, la esposa de Sobyanin se dedica a la colocación de azulejos y su producción.
Sin embargo, el jefe de Moscú niega obstinadamente este hecho. La razón oficial es la presencia de una gran cantidad de reclamos de los residentes de la ciudad sobre el nuevo revestimiento. La mayoría de las quejas se refieren a la calidad de las baldosas. Los ciudadanos también notaron que la superficie de asfalto era mucho más conveniente para los peatones con cochecitos.