De acuerdo con el Código Civil, el deudor puede quedar eximido de responsabilidad en virtud del contrato si puede probar que la violación de las obligaciones fue causada por circunstancias de fuerza mayor. Estas circunstancias también se denominan fuerza mayor.
Definición y signos de circunstancias de fuerza mayor
Las circunstancias de fuerza mayor se mencionan en el tercer párrafo del artículo 401 del Código Civil de la Federación de Rusia. Se definen como "extremos e inevitables en las condiciones dadas". Sin embargo, ni el marco legal internacional ni el interno contiene una lista completa y obligatoria de los mismos, por lo que, en ausencia de un listado específico de circunstancias en el acuerdo que las partes considerarán insuperables, posteriormente aparecerán inevitablemente los desacuerdos. Por tanto, sería aconsejable prescribir las siguientes circunstancias en el acuerdo: inundaciones, terremotos, incendios, accidentes de transporte, publicación de normas prohibitivas, disturbios civiles, motines, guerras y hostilidades, huelgas de personal. La fuerza mayor tiene signos comunes de extremado, inevitabilidad, imprevistos. Tales circunstancias deben ser de naturaleza externa y aparecer después de la celebración del contrato.
Si el obstáculo al cumplimiento de las obligaciones derivadas del contrato es de carácter temporal, el contratista queda eximido de responsabilidad únicamente durante el período en que exista dicho obstáculo.
Fuerza mayor: cuestiones controvertidas
La atribución a la fuerza mayor de los fenómenos de la vida pública (motines, operaciones militares, bloqueos y huelgas) es un tema controvertido. Durante mucho tiempo, hubo una opinión en el derecho civil soviético de que tal referencia a los fenómenos sociales como una fuerza irresistible era inaceptable. Actualmente, no todas estas circunstancias pueden reconocerse como fuerza mayor. Por ejemplo, si un estado de guerra dura mucho tiempo, pierde el signo de imprevisibilidad y, por tanto, no puede atribuirse a fuerza mayor.
Los incendios provocados también son controvertidos en los tribunales. Es necesario demostrar que tales circunstancias tienen todos los signos de fuerza mayor y se desconocen las personas culpables de causar el daño.
La práctica judicial nacional también es cautelosa al evaluar la huelga. Se cree que solo las huelgas de sectores industriales enteros pueden atribuirse a circunstancias de fuerza mayor, ya que la terminación del trabajo de una organización puede ser provocada deliberadamente. Es controvertida la cuestión de atribuir delitos (por ejemplo, ataques terroristas) a fuerza mayor. Actualmente, el punto de vista imperante niega su actitud ante las circunstancias de fuerza mayor. No obstante, pueden calificarse de fuerza mayor si se comprueba que reúnen todas las características necesarias.