Solo una tripulación de astronautas estadounidenses aterrizó en la luna. Ninguno de ellos era un saltador de altura profesional, pero a juzgar por sus recuerdos, saltaban con bastante facilidad hasta dos metros.
Saltar a la Luna: teoría y práctica
En sus memorias, el astronauta Armstrong dijo que la altura máxima de su salto durante la expedición lunar fue de dos metros. Dado el peso del traje, todo esto parece lógico. ¿Qué pasa entonces? Por el momento, el récord mundial de salto de altura es de 2,45 metros y pertenece a Javier Sotomayor (Cuba). Si, por ejemplo, envías a este atleta a la luna, ¡resulta que podrá despegar 14,7 metros de la superficie!
Sin embargo, en realidad, la situación puede parecer muy diferente. Después de un poco de reflexión y de hacer simples cálculos matemáticos, llegamos a la conclusión de que ninguna persona común, ningún gran atleta puede alcanzar alturas tan increíbles.
Si tu peso es de 70 kg, entonces en la luna solo pesarías 11,5 kg.
La razón es la misma gravedad notoria. Por supuesto, es mucho más pequeño en la Luna. Teóricamente, en la Luna, una persona podrá saltar a una altura de dos a tres metros, pero después de un largo período de preparación y sin un traje espacial pesado. Además, aún puede sufrir lesiones graves. En la Luna, bajo un fuerte impacto, el cuerpo puede iniciar un movimiento caótico. En otras palabras, si saltas a la luna, existe una alta probabilidad de que una persona no vuele hacia arriba, sino hacia adelante o hacia un lado, también girando. Y solo después de un largo período de entrenamiento podrás aprender a controlar tu cuerpo.
Mientras tanto, los saltos realizados por atletas profesionales son simplemente imposibles en la luna. Existe una cierta técnica que proporciona aceleración y empuje, lo que no se puede hacer en condiciones extraterrestres. En condiciones lunares, todas sus acciones serán extremadamente difíciles. Por lo tanto, no importa cuánto lo intente el atleta, no tendrá éxito.
Los movimientos del atleta en la luna serán seis veces más lentos.
¿Y cómo fue realmente?
Al saltar sobre la luna, las piernas se mueven con bastante lentitud y los saltos son similares a los saltos. Se crea la ilusión de cámara lenta. El cuerpo del astronauta, vestido con un traje espacial bastante pesado, parece estar ligeramente desplazado hacia adelante para no perder el equilibrio. Al tomar una curva, todos sus movimientos se ralentizan un poco. Esto se puede atribuir al ligero agarre de la suela sobre el suelo lunar. Junto con el traje espacial, el astronauta pesa aproximadamente 160-170 kg, en la luna unos 30 kg.
Todavía se debate si hubo una expedición lunar o si todos los episodios fueron filmados en los pabellones de Hollywood. Por supuesto, todos deciden por sí mismos en qué creer. Pero el hecho permanece: si una persona alguna vez coloniza la luna, entonces sin entrenamiento, no saltará dos metros de altura.