El zafiro es una piedra preciosa muy hermosa, por lo que a menudo se falsifica. Pero el zafiro se diferencia de otras piedras en sus características y propiedades únicas.
Es necesario
- - zafiro o su falso;
- - refractómetro.
Instrucciones
Paso 1
Si desea saber si su joya es de zafiro, use un instrumento que mida la refracción de la luz: un refractómetro. El zafiro tiene un índice de refracción de aproximadamente 1, 762-1, 778. No olvide que el zafiro es corindón. En términos de dureza, ocupa el segundo lugar después del diamante, por lo que el zafiro es más duro que todas sus imitaciones. Si tienes una piedra con una dureza de musgo de 8.5, pásala sobre el corindón. No quedará el menor rastro en un zafiro real. El corindón azul es más similar a la aguamarina y la tanzanita, pero la tanzanita es rojiza y la aguamarina es verdosa.
Paso 2
Eche un vistazo más de cerca a su piedra si desea distinguir el zafiro cultivado del natural. El artificial no tiene inclusiones, se ven burbujas de gas en él. Para obtener piedras sintéticas, muchos fabricantes usan titanio, por lo que bajo los rayos ultravioleta, el zafiro "titanio" será verdoso. El corindón azul natural tiene reflejos blancos de los que carece el mineral sintético
Paso 3
Una característica distintiva de algunos zafiros artificiales es la zonificación curvilínea, que no se encuentra en las piedras naturales. Además, los minerales sintéticos pueden contener inclusiones de platino, oro y cobre. Los corindones hidrotermales tienen una microestructura de crecimiento irregular. Sin embargo, los fabricantes están tratando de mejorar el proceso de cultivo de piedras, por lo que solo un especialista puede distinguir con confianza un mineral artificial de uno natural.
Paso 4
Las piedras sintéticas son más hermosas que las naturales. La composición química de los minerales naturales y artificiales es la misma, pero los cultivados no tienen defectos externos e inclusiones, su color es más puro y profundo. Las piedras preciosas reales están certificadas, otra señal que las distingue de las falsificaciones. Piense en el precio de su zafiro, el corindón azul real cuesta desde unos pocos cientos hasta varios miles de dólares.