Los activos fijos de la empresa se entienden, en primer lugar, las instalaciones y equipos que se utilizan para la producción de productos. Los activos fijos están sujetos a reposición ya que están física y moralmente desgastados.
El concepto de depreciación de los activos fijos de una empresa
Los activos fijos incluyen los recursos materiales de la empresa, que no se consumen en un ciclo de producción. Los activos fijos de la empresa sirven durante años y están sujetos gradualmente a un desgaste, lo que se entiende como la pérdida gradual de su valor.
La depreciación de los activos fijos de una empresa es una disminución de su costo inicial. Esto se debe a la destrucción gradual de los equipos durante el proceso de producción o su obsolescencia. La depreciación de los activos fijos en contabilidad se refleja junto con la depreciación cada mes.
Tipos de depreciación de activos fijos
Hay dos tipos de depreciación de los activos fijos de la empresa: física y moral. El deterioro físico es la pérdida de las cualidades del consumidor por equipos e instalaciones. Distinga entre el desgaste físico del primer y segundo tipo. En el primer caso, el deterioro de los medios de producción se produce como consecuencia de su explotación. El grado de tal desgaste depende de la intensidad del uso de los recursos de capital y aumenta con el crecimiento de la producción.
El deterioro físico de los activos fijos del segundo tipo es la destrucción de los medios de producción inactivos bajo la influencia del clima o debido a un funcionamiento inadecuado y un mantenimiento deficiente. Si el primer tipo de desgaste físico está económicamente justificado y es inevitable, el segundo tipo es un ejemplo de uso ineficiente de recursos.
La disminución en el valor de los activos fijos de la empresa puede no estar asociada con la pérdida de sus cualidades de consumo. En este caso, se utiliza el concepto de obsolescencia. Hay dos formas de ello. El aumento de la eficiencia de producción de bienes de capital es la causa de la obsolescencia de los activos fijos de primer tipo. Es causada por la aparición de medios de trabajo más baratos. La obsolescencia del segundo tipo surge de la mejora de los medios de producción, que se vuelven más eficientes y fiables. Por esta razón, el valor de los equipos antiguos está disminuyendo.
Ambas formas de obsolescencia de los activos de la empresa surgen como resultado del progreso técnico. Desde el punto de vista económico, están plenamente justificados, ya que los medios de producción obsoletos están siendo reemplazados por otros más avanzados. Sin embargo, para una empresa en particular, la obsolescencia de los activos significa un aumento significativo en los costos de producción.