Para observar los cuerpos celestes y estudiarlos, la humanidad utiliza telescopios, dispositivos que le permiten "ver" un objeto distante mediante la recopilación de información sobre su radiación electromagnética.
El telescopio está diseñado para observar objetos espaciales remotos, como:
- planetas;
- asteroides;
- cometas y meteoros;
- estrellas y sus cúmulos;
- galaxias;
- nebulosas.
Todos estos objetos espaciales se encuentran a una distancia considerable y se requiere un potente dispositivo óptico para estudiarlos. El telescopio, que se inventó en Holanda en 1608, se convirtió en un dispositivo de este tipo. El primero consistía en los lentes más simples y tenía capacidades muy escasas para los estándares modernos, pero en ese momento fue un avance significativo en el estudio del espacio.
Telescopios de lentes y espejos
Los más extendidos son los telescopios de lentes, que se basan en el principio de refracción, es decir, la refracción de la luz y enfocarla en un punto. Los telescopios de lentes son los más baratos, pero tienen una desventaja como la aberración, es decir, la distorsión de la imagen visible.
La próxima generación de telescopios es reflectante. Su acción se basa en una lente en forma de espejo esférico, que recoge los rayos de luz y luego los refleja hacia la lente. Estos telescopios están cada vez más extendidos debido al bajo coste de fabricación. Además, con la ayuda de telescopios de espejo, fue posible tomar fotografías de los objetos en estudio.
Radiotelescopios
En relación con el desarrollo de las tecnologías modernas, comenzaron a aparecer tipos de telescopios fundamentalmente nuevos, como los radiotelescopios, que permiten estudiar objetos espaciales muy distantes. Se basan en un cuenco de paraboloide fabricado en metal. Se instala un transceptor de señal de radio en el recipiente, que envía una señal para su procesamiento posterior a un complejo informático. El principio de su trabajo se basa en el reflejo de la señal enviada desde el objeto en estudio.
Las ventajas de estos telescopios incluyen el hecho de que pueden usarse para estudiar cuerpos celestes en cualquier clima de la Tierra. Además, con la ayuda de radiotelescopios, aumenta la precisión de la investigación, ya que todos los datos se procesan sin intervención humana, es decir, los científicos ven datos de resultados de investigación listos para usar que no pueden interpretarse de otra manera debido a las peculiaridades de la percepción de un objeto por visión humana.
Telescopios infrarrojos
Los telescopios infrarrojos también se han utilizado ampliamente en la investigación astronómica recientemente. Este tipo de dispositivos registran la radiación térmica de los objetos espaciales. La desventaja de estos telescopios es que solo pueden estudiar objetos que emiten calor, como los planetas del sistema solar.
En relación con el desarrollo de la astronáutica, los telescopios para mejorar la calidad de la observación comenzaron a colocarse en la órbita de la Tierra en forma de satélites. El telescopio en órbita más famoso es el telescopio Hubble. Los telescopios en órbita, es decir, espaciales, suelen ser de tres tipos:
- radiotelescopios;
- telescopios de infrarrojos;
- telescopios gamma.