Las excursiones históricas a los orígenes de la formación de la humanidad de una forma u otra conducen a la era, que comúnmente se llama la era de la economía productiva. No todo el mundo conoce el significado de este término.
Una granja productora es una granja donde la principal fuente de vida humana son los animales domésticos y las plantas cultivadas.
Una economía manufacturera nació hace unos 12-10 mil años, cuando apareció la posibilidad de domesticación tanto de plantas como de animales. En un principio, se combinó con una economía basada en las actividades de cazadores, pescadores y recolectores. Pero esta actividad ya no se basaba en la extracción elemental de productos alimenticios, como en los días de la agricultura natural y de apropiación, sino que estaba asociada a una serie de métodos bastante complejos en la organización del trabajo y, por lo tanto, al desarrollo de diversas habilidades técnicas. Esto debería incluir el desarrollo de habilidades en el procesamiento de los productos extraídos.
Así, en la historia de la evolución de la humanidad surgió la agricultura y la ganadería, que es la base de una economía productiva. Este tremendo logro de la economía primitiva se extendió por todo el mundo, por supuesto, de manera desigual, ya que estaba asociado con las condiciones del medio natural en el que vivía esta o aquella tribu primitiva.
El desarrollo más rápido de la economía manufacturera tuvo lugar en Oriente Medio. Los arqueólogos en el norte de Irak han descubierto asentamientos donde se domesticaron cabras, ovejas y ganado hace 10.000 años. El hecho de que la agricultura también se desarrolló en estos asentamientos se evidencia en los fragmentos encontrados de productos de pedernal para hoces y restos de molinillos de grano. La transición de una economía de apropiación a una economía de producción implicó el desarrollo del sistema de clanes comunales, lo que significa que la comunidad de pescadores, recolectores y cazadores fue reemplazada por la comunidad de agricultores y pastores.
Dado que las mujeres se dedicaban principalmente a la recolección, fueron las mujeres las primeras en aprender a cuidar las plantas silvestres para obtener un nuevo producto. Y los hombres, cazadores y pescadores, fueron los primeros en domesticar un perro, una oveja, un cerdo, una cabra y una vaca. Fue el sexo masculino el que domesticó al caballo y al camello bactriano. Es cierto que los rastros de la cría de ganado en la antigüedad se limitan al hallazgo de restos óseos, que han sufrido un cambio en la estructura del esqueleto de los animales salvajes. Lo que hace que la tarea sea muy difícil para los científicos que estudian este tema.