La vida moderna dicta las reglas. Pero, ¿qué hacer cuando alguien intenta imponerle "la opinión de otra persona"? Y la emoción juega un papel importante aquí. Entonces, ¿la exageración por el comercio es un fenómeno natural o una enfermedad adquirida?
¿Ha pensado alguna vez en el mercado actual? De hecho, muy a menudo una persona se convierte en parte de una acción bien planificada de otra. Se trata de competitividad y, más específicamente, de una forma de atraer más atención a un tema en particular. Este fenómeno se llama bombo publicitario.
Refiriéndose a los diccionarios, puede encontrar varias interpretaciones de este fenómeno. Por ejemplo, según Ozhegov:
"La excitación es un aumento o una disminución artificial y especulativa del tipo de cambio de los valores o de los precios de las materias primas para obtener más beneficios".
Algunos hechos historicos
Durante mucho tiempo y en casi todas partes, la gente se enfrenta a la palabra "emoción". Pero, ¿de dónde vino esta expresión?
Resulta que todo es muy simple, la palabra fue adoptada del elegante francés a principios del siglo XVIII. Éstos, a su vez, "tomaron" la palabra de los italianos. La emoción era aplicable solo mientras trabajaba en intercambios. Determinó el levantamiento de planes, la compraventa de valores. Con el tiempo, la palabra salió "al pueblo" y adquirió muchos matices. La emoción apareció en todo: valores, ventas. Pronto se desarrolló que el concepto se vuelve inseparable con la publicación de información y rumores sobre un producto en particular.
Como funciona
Una nueva pequeña empresa ha estado ofreciendo sin éxito un determinado producto en el mercado durante algún tiempo. Hay oferta, pero no demanda. ¿Qué hacen los gerentes de relaciones públicas con experiencia? Se crea algún tipo de noticia relacionada con el producto. Excelente publicidad y rumores de que el producto desaparecerá de los mercados después de un tiempo o se volverá más caro. Una persona es intrínsecamente muy crédulo y, por lo tanto, después de un tiempo, puede observar la emoción en relación con este o aquel producto. Intente recordar la popularidad de la venta de hámsters parlantes en Internet en 2013.
En realidad, hay muchos ejemplos de entusiasmo creado con éxito en torno a un determinado producto. Pero también sucede que un crecimiento en las ventas iniciado de manera espontánea no cede durante mucho tiempo, y luego se estabiliza en un buen nivel y lleva la marca a un nuevo nivel.
¿Ir con la corriente o ir en contra del sistema? Todo el mundo lleva mucho tiempo decidiendo por sí mismo, pero vale la pena contradecir lo que a veces incluso nos beneficia. Una cosa que debes recordar con certeza: la emoción es un fenómeno que llega, aprende a adivinar la hora para no perder la oportunidad de cambiar la situación en una dirección ganadora para ti.